Luego de cursar el primer cuatrimestre de mi vida como universitaria y analizar un poco cómo fue todo, me gustaría compartir algunos consejos:

1) No apeles a la memoria, usá agenda: sea de papel o digital (yo uso el calendario de Gmail y lo sincronizo con el celular). Aunque tengas una buena memoria, una ayudita no viene mal, te permite organizarte mejor. En la universidad hay materias cuatrimestrales, anuales, parciales, finales, entregas de trabajos prácticos, presentaciones orales, tarea, etc. Al tener las fechas anotadas te ahorrarás olvidos y confusiones del tipo “¡Jodeme que hoy había que entregar el TP de Economía! ¡Pensé que era la semana que viene!”. Incluso, podrás organizarte mejor para preparar los exámenes.

2) No te anotes a tantas materias: Ok, estás entusiasmado por empezar la universidad y te querés anotar a la mayor cantidad de materias posible. ¡Don’t do that! Si no trabajás podrías llegar a tener el tiempo para dedicarle a 5 materias. Pero si sos de los míos, que trabajás y estudiás, te conviene bajar un poco el entusiasmo y ser realista: ¿voy a tener ganas de trabajar 6 u 8 hs y cursar todos los días?

No pienses solo en la cursada, tené en cuenta que además de las horas de cursada que implica cada materia, tenés que estudiar, hacer trabajos prácticos, tareas, etc. y eso multiplicado por 5 materias. ¡Una locura! Durante este cuatrimestre estoy de licencia laboral por un tema de salud y cursando 3 materias (para el segundo cuatrimestre tal vez me anote a 4, pero depende de las que me habiliten en la universidad y qué tan heavy sean).

3) Conviene prever dos o tres alternativas para viajar: Al menos aquí en Argentina cada tanto hay paro de transporte público o cortes. Hay profesores que entienden la situación y no pasan falta ni llegada tarde, pero hay otros a los que no les importa y te la pasan igual (alto bajón); mejor es ser precavido y tener al menos dos formas para llegar a la universidad. Si viajás en transporte público, antes de salir fíjate que los trenes, colectivos y subtes estén funcionando con normalidad.

4) No vas a tener asegurada una metodología de estudio en tu primer cuatrimestre: La mayoría de nosotros salimos del secundario estudiando mal, de memoria o teniendo poco que leer. En la universidad la cosa cambia, tenés que estudiar el triple de contenido.

Hay materias prácticas y teóricas, no todas las podes estudiar de la misma manera, incluso si tenés dos teóricas o dos prácticas, la metodología va a ser diferente. Te conviene ir probando distintas metodologías hasta descubrir la que mejor se adapta a vos.

5) No faltes a los exámenes: Aunque no hayas estudiado nada, aunque estés nervioso, aunque tengas miedo o sientas que te faltó estudiar más, presentate igual. El “no” ya lo tenés. ¿Qué es lo peor que te puede pasar? ¿Ir a recuperatorio? ¿Recursar? No es la muerte de nadie. Al presentarte tenés más chances de que justo te tome lo que sabías, de aprobar o de ver cómo evalúa el profesor, lo que pregunta, y en caso de que tengas que ir a recuperatorio vas a estar mejor preparado.

6) Evaluá tu cuatrimestre: Si te fue bien o te fue mal, es indistinto. Está bueno terminar el cuatrimestre y pensar qué cambios podrías hacer o cómo fue tu desempeño durante el mismo. Esto te dará un panorama más claro de tu situación actual y te permitirá arrancar el siguiente cuatrimestre con el pie derecho. Pero ojo con los típicos autoengaños que luego no cumplimos del tipo “Este cuatrimestre voy a arrancar a leer antes”.

Y vos, ¿qué aprendiste en el primer cuatrimestre? ¿Qué cambiarías para el segundo? Te leo en los comentarios. ¡Suerte!